Seguí las órdenes de Peter Pan para ser feliz, la segunda estrella a la derecha y todo recto hasta el amanecer. Lástima que por el camino me encontré a un payaso que se había escapado del circo, se rió de mi pero tranquilos me di cuenta a tiempo y al final todo esta en su sitio. Ahora soy yo la que se ríe de él, porque al fin y al cabo es eso ¿no? un payaso y yo sigo mi camino, todo recto hasta el amanecer.
No tengo que sufrir para aprender; ni amar para que me quieran. No me tienen que olvidar para recordarme; y no tengo que vivir dos siglos para aprender que es la puta vida. No soy un juguete de ningún niño, y no leo cuentos. Mi cabeza, las decisiones, y mis ideas propias, son mías y de nadie más.
Que no me cuenten historias para dormir que esta tonta ya ha ido y ha vuelto dos veces.
¿Quién me va a obligar a elegir mis sueños? ¿Quien me va a obligar a hacer lo que no quiero? ¿Tú?
Desde luego que tú, no.
El miedo es como la familia, que todo el mundo tiene una. Pero aunque se parezcan, los miedos son tan personales y tan diferentes, como pueden serlo todas las familias del mundo: Hay miedos tan simples como desnudarse ante un extraño. Miedos con los que uno aprende a ir conviviendo. Hay miedos hechos de inseguridades. Miedo a quedarnos atrás. Miedo a no ser lo que soñamos. A no dar la talla. Miedo a que nadie entienda lo que queremos ser. Hay miedos que nos va dejando la conciencia: el miedo a ser culpables de lo que les pasa a los demás. Y también el miedo a lo que no queremos sentir, a lo que no queremos mirar, a lo desconocido. Como el miedo a la muerte, a que alguien a quien queremos desaparezca. Y hoy he escuchado a un tal Punset en la tele, un señor encantador, que decía que la felicidad es la ausencia del miedo….Y entonces, me he dado cuenta de que últimamente, yo ya no tengo miedo.
LHDP- El miedo
Lo difícil no es conocer a gente especial, lo realmente difícil es que esa persona, al cabo del tiempo, siga siendo igual de especial para ti como lo fue el primer día, y que aunque te marches a la otra punta de su mapa sientas que puedes contar con ella todos los días.
Ser joven no es tener entre 10 y 30 años. Ser joven es salir a la calle y comerse el mundo. Correr bajo la lluvia y creer que el sol nacerá de nuevo un millón de veces más antes de morir.
No el que te defiende de frente y te critica por la espalda.
Al final de lo único que te vas a acordar, es de las cosas buenas, de las veces que te has reído a punto de quedarte sin respiración, de esos besos y de esos abrazos que han cambiado tu vida y nunca se irán de tu cabeza, no te entretengas en tonterías y en gilipolleces que dice la gente sin vida propia, que necesita opinar sobre la vida de los demás sin ninguna coherencia y vete a buscar lo que te haga feliz, que el tiempo corre muy deprisa y te aseguro que lo único que no te va a gustar de la vida es que te va a parecer demasiado corta.
No sigas a un amor que te hizo sufrir, un amor que un día se olvidó de ti y lo peor, un amor que un día se fue de ti. No confíes en alguien que te dijo: "te lo juro, que lloré", y luego, te reemplazó sin ningún dolor. Recuerda: "Quien se va sin ser echado, vuelve sin ser llamado"
1. Amarás a alguien sobre todas las cosas. Si lo amas, haz que te ame, si no te ama, no le ames.
2. No tomarás el nombre de tus enemigos en vano. Si lo tomas, habla bien de ellos.
3. Santificarás las fiestas. Bébete el mundo. Si lo consigues, siéntete afortunada.
4. Honrarás a aquellos que te mientan, mentirás a aquellos que no lo merecen.
5. No matarás, y si lo haces, que sea por amor.
6. No cometerás actos impuros, y si lo haces, reza.
7. No hurtarás. Y si lo haces, hurta un beso.
8. No dirás falsos testimonios ni mentirás. Y si lo haces, que sea por amor.
9. No consentirás pensamientos ni deseos impuros. Y si lo haces, piensa en escapar de este círculo.
10. No codiciarás los bienes ajenos. Y si lo haces, que sea porque codiciaron el tuyo.
Estos diez mandamientos se resumen en dos:
Ama, porque estás vivo. Sufre, porque amas.
