Déjate llevar;

Imagina que estoy cerca de ti, a cinco centímetros, a tres, a uno. Sientes mi respiración. Mi mano acaricia tu pelo, baja lentamente hasta llegar a tu pecho. Mi respiración se acelera, tengo ganas de ti. Nadie puede interrumpir este momento. Tu mirada con mi mirada, una mirada de deseo, de esas que dicen más que palabras. No dices nada, nuestros actos hablan por si solos. Nuestros labios están tan cerca que ni hasta un soplido de aire cabe. Ven, acércate más, bésame como si el mundo se acabara después, como si no hubiera un mañana. 

Pequeños detalles;

Se dice que algo tan insignificante como el aleteo de una mariposa, puede desencadenar un huracán en el otro extremo del mundo. En la vida hay pequeños detalles que marcan la diferencia, que nos marcan para siempre, que pueden cambiarlo todo. No creo en las grandes decisiones, creo en esos pequeños detalles insignificantes del día a día. 

Todo es mucho más fácil de lo que parece;

¿Dia optimista o pesimista? En nuestras manos está el hacer de cualquier día, el mejor día de nuestras vidas. Ni los arrepentimientos, ni las pocas ganas de seguir o de cualquier cosa nos tiene que frenar en este mini reto que al fin y al cabo es estar a gusto con nuestras vidas, tener ilusión y ganas de vivir. Si no ocurre esto, empieza a hacerte preguntas y cambiar, no conformarse. Acción, reacción. Acertar, equivocarse. De eso se trata, de esfuerzo y hacer las cosas de tu día a día porque de verdad quieres. Si lo piensas, es mucho más fácil de lo que parece.

Quiero todo y más;

¿Que qué es lo que quiero? Noches en vela, días de sueño. Lo que quiero son noches eternas en las que pierdo la noción del tiempo, días de sol interminables. Quiero lo imposible, lo difícil de obtener. Quiero volar a ras de suelo, quiero soñar con todo aquello imaginable. Quiero sentir lo que nunca he sentido, quiero amar hasta que duela. Quiero que mi vida sea de ensueño y que esa vida sea contigo.